Creo que debes enojarte

Revindicar la IRA

Siempre me ha parecido curioso que la sociedad reprima tanto el enfado. Es como sí de alguna manera se nos negará el derecho a expresar los desacuerdos. De hecho, según la cultura de un país, esto puede ser más o menos intenso. 

Probablemente la intención de tener un dominio o autocontrol sea buena, y de hecho lo es… pero cómo saber manejar una emoción que se nos ha prohibido expresar desde la infancia?

Según la Medicina Tradicional China, la ira corresponde al Elemento MADERA, por lo que se la asocia a los meridianos de Hígado y Vesícula Biliar… hasta ahí vamos bien.
La cuestión es que el elemento MADERA tiene una tendencia YANG (a subir, a exteriorizar, a la rapidez, al calor) lo cual puede traducirse en que si no está suficientemente hidratado (de YIN – sangre y líquidos vitales), el enfado pueda ser explosivo y violento. Y cuándo suele suceder esto? Entre otras cosas, cuando hemos sostenido durante mucho tiempo una frustración, un enojo o un resentimiento, ya que estas emociones son energías que deben canalizarse de alguna manera hacia el exterior, o hacia el interior… yo recomiendo que sean exteriorizadas, porque de lo contrario, con el paso del tiempo, este cúmulo de sentimientos puede llevarnos a estados de neurosis, ansiedad, depresión o lo que a mi me resulta aún peor, a desconectarnos de nuestro SER.
Es aquí cuando reivindico a LA IRA como la emoción necesaria para producir un cambio, para determinar nuestro espacio en la vida, para afirmar nuestra presencia.

Te invito a escuchar mi último podcast en el que hablo del tema.

Que tengas Buen Shen,

Michelle